Después de llevarse el NASCAR Mexico City Weekend con un amplio dominio, Shane van Gisbergen dejó en claro su maestría en la pista y se metió de lleno a la contienda por el campeonato, una a la que todavía le queda mucha cuerda.
Su victoria no fue la más esperada por el público, pero la realidad es que este piloto ha demostrado hechuras y argumentos para ser considerado como uno de los contendientes al campeonato.
Dentro de tantas estrellas, SVG parece haber encontrado su propio brillo, y las oportunidades perfectas para trascender, pero en una competida temporada, ¿cuáles son sus verdaderas chances de ganar? Aquí lo analizamos.
Antes de eso, vamos a repasar un poco de la trayectoria de este neozelandés de 36 años, nacido el 9 de mayo de 1989 y campeón de tres títulos en Supercars Championship.
Así ha sido la trayectoria de Shane van Gisbergen
Las credenciales de este piloto son muchas y también variadas. De 1998 a 2004, compitió en su país, en motocross, quarter midgets y karts, ganando el tercer lugar de Formula First y también un premio al novato del año, nada de esto es casualidad, pues recibió una beca para prepararse rumbo al estrellato.
Durante 2014, ganó 7 de 9 carreras de resistencia junto a Simon Evans, además del Gran Premio de Nueva Zelanda como parte de la Toyota Series.
Sumado a todos estos logros mencionados, corrió en Gran Turismo durante eventos como las 24 horas de Daytona, pero sus mayores logros fueron en Mount Panorama, donde ganó la Bathurst 1000, las 6 y las 12 horas de Bathurst, por lo que es junto a Paul Morris el único participante que ha ganado estas 3 competencias.
Un piloto de huella inmediata en NASCAR
Su llegada a dicha categoría se dio el 2 de julio de 2023, cuando debutó en la NASCAR Cup Series durante el circuito callejero de Chicago y ganó la carrera, un estreno impresionante, debido a que fue la primera vez en 60 años que un debutante gana en dicha categoría, luego de que Johnny Rutherford lo hiciera en 1963 durante los Daytona Duels.
2025 ha sido sin duda su mejor temporada, ya que suma dos victorias, una en tierra azteca, y otra nuevamente en casa de los Bulls, firmando así, su pase a la postemporada y obligando al público a plantearse la pregunta sobre cuántas posibilidades tiene de conquistar el trono de Joey Logano y unirse a la lista de campeones de la serie, donde además, sería el primer no nacido en Estados Unidos que lo logra.
¿Cuáles son sus ventajas y desventajas?
Como puede verse, SVG es un dominador de pruebas callejeras, y también cuenta con bastante experiencia internacional, además de un fuerte apoyo de Justin Marks, el dueño de Trackhouse, quien lo considera “el mejor piloto de carretera en la historia de NASCAR”.
También figura como favorito en las casas de apuestas sobre otros pesos pesados como Kyle Larson, un reflejo de la fe que hay puesta en él.
No obstante, hay factores que complican sus oportunidades, pues si bien es un rey de las calles, sufre bastante en los óvalos, que le han costado muchos puntos a lo largo de la temporada, muestra de ello es que dejando de lado sus dos triunfos, sólo una vez más quedó dentro del Top 10 en alguna carrera esta campaña.
Por supuesto, esto ha generado dudas entre los fans, que esperan una mejoría notoria en las pistas más demandantes, algo en lo que deberá de trabajar sí o sí, pues en Playoffs sólo habrá un circuito mixto: el de Charlotte, y para ello primero deberá calificar a la Ronda de los 12.
Shane van Gisbergen debe mejorar mucho para conseguir su sueño
En resumen: SVG puede ser considerado como un piloto impresionante, ya que es el extranjero con más triunfos en NASCAR Cup Series tras superar los dos de Daniel Suárez, Juan Pablo Montoya y Marcos Ambrose. Su legado apunta para crecer y llegar a cosas grandes, tan enormes que toquen terrenos inimaginados previamente; no obstante, todo dependerá de su capacidad para brillar más allá de los circuitos callejeros, y adaptarse a un tipo de pista que sólo los más grandes transitan sin problema.